“Juventud divino tesoro” empieza la poesía tan famosa de Rubén Darío. ¿Pero cuantos jóvenes se habrán contemplado en el espejo con lágrimas en los ojos? De por sí, los años de la pre-adolescencia y adolescencia son difíciles. Son años llenos de emoción, de crecimiento, de cambios físicos y emocionales, y de nuevas experiencias. Y para muchos chicos y chicas estos cambios se manifiestan también en el cutis… con acné facial.
De joven tuve mucha suerte. Casi nunca me salían “granos” en la cara. Lo mas típico en mi era que me saliera un grano en la barbilla o el labi0 una vez al mes coincidiendo con la regla. Cosa hormonal. Si tenía mala suerte, me salía un grano en la nariz, o como dicen en España, “un grano en la nariz por infeliz.” En cuanto a las espinillas tampoco me salían muchas pero cuando me salían era en la frente debajo del flequillo, o en los hombros.
En estos años, los años 80, no se sabía mucho sobre los tratamientos contra el acné facial.. Las recomendaciones que recibíamos variaban entre lavarte la cara los mas posible con jabón (lo cual seca mucho la piel y permite la formación de mas espinillas), mojar un algodón con alcohol y aplicarlo sobre el grano (buf!) y poner gotas de aceite de vitamina e directamente sobre la cara (mala idea). Efectivamente tuve suerte porque tengo amigas que aun tienen cicatrices en la cara del acné que tuvieron. Yo era experta en sacar espinillas, pero hoy en día sé que es mala idea pellizcar una espinilla con los dedos. Al hacerlo se puede infectar el área con la bacteria que llevan las uñas causando más problemas e incrementando la posibilidad de cicatrizar la piel.
He pasado de niña a mujer, pero ahora me toca ayudar a mi hija mayor batallar contra el acné facial.. Tiene más que yo, eso sí. En la frente la salen granos pequeños difíciles de ver, pero notables. En el entrecejo la salen espinillas, y también una vez al mes la sale un grano rojo. Los consejos que la doy yo son completamente opuestas a las que recibí. Por empezar, la prohíbo exprimir los granos y las espinillas. Tampoco la aconsejo lavarse la cara constantemente, y de ninguna manera la dejaría ponerse alcohol en la cara. En cambio a todo esto, la he ayudado establecer una rutina de limpieza e hidratación con tratamientos especiales cuando la cosa se pone difícil. Y si llega el momento que el acné facial se la ponga poner… la llevaré directamente al dermatólogo.
No hay que limitarse a los tratamientos caseros cuando uno tiene acné facial. En la oficina del Dr Zizmor, un dermatólogo respetado y conocido en NY, te pueden ayudar a ti o a tu ser querido. Tiene más de 25 años de experiencia tratando toda clase de problemas dermatológicos, incluyendo el acné facial. Puedes llamar a su oficina (1 800 771 6654) para hacer una cita o recibir más información. Y diciendo el código LMB2012 recibirás un regalo gratis. En la oficina del Dr. Zizmor recibirás los tratamientos más recomendables y toda clase de consejos y atención. Lo más importante para él es asegurar tu confort y tu seguridad, y te podrá ofrecer tratamientos efectivos y económicos.
Y siempre recuerda los tips del Dr. Zizmor que te ayudarán a la piel con o sin problemas:
- Come bien para alimentar la piel
- Bebe mucho agua para hidratarla
- Duerme lo suficiente
- Manten una vida activa. Es buena para la piel y para el resto del cuerpo.
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